El agua quizás sea la última zona de resistencia frente a la alienación vertical: uno de los últimos elementos de la tierra que todavía exponen al humano a esa dinámica trascendental de la naturaleza, la ley de horizontalidad del agua – la naturaleza vuelta tiempo- el nadador declina por un momento su verticalidad bípeda y adopta las cualidades de un semihéroe para recrear esa memoria solitaria y horizontal. Es que en el agua el nadador puede ser un hombre redimido y desalienarse en un tiempo fuera del tiempo. Fascinación ante la belleza huidiza del que nada. (extracto artículo de Oliverio Coelho)